Entre la vida y la muerte…

Entre la vida y la muerte…

Entre la vida y la muerte…

9

Entre la vida y la muerte…

Entre la vida y la muerte…

(1)

George subió al avión mientras que corazón pensaba en Lyvi, pues a pesar del poco tiempo que estuvieron juntos no podía olvidarla…. ¿qué secreto tendría? parecía un ángel puro en una sociedad cruel e injusta, recordó con tristeza los debates de Lyvi sobre la mujer y sus derechos violados en el judaísmo, ¿qué religión es esa que permite heredar a la mujer como se heredan los bienes? y considerarla como impurezas y perros, no hereda y no tiene ningún derecho? recordó el debate sobre la falsificación de la Torá, y su odio a los musulmanes asesinos de su padre, y sobre el pueblo elegido que mata y viola y roba ‘’los hijo de Shiloh’’ recordó el debate sobre las ruinas inexistentes prueba del derecho de los judíos en la zona… Sonrió mientras recordó sus palabras cuando dijo que no se trasladaría de la complejidad del judaísmo a la complejidad del catolicismo, y mientras estaba con sus recuerdos le interrumpió el viajero que estaba a su lado :

- ¿Qué es esta inyección que tiene en la mano señor?

- Me la dio el médico, y me dijo que debo llevármela en el avión por si me sube la fiebre de repente.

- ¿Me permita verla?

- ¿Sí, es usted médico?

Miró la inyección, y leyó la hoja de recomendaciones que venía con ella.

- Soy farmacéutico, y esta inyección es muy importante para usted, es una medicación utilizada raramente, ¿para qué lo necesita?

- No lo sé y no me lo explicó el médico.

- No lo sé, pero esta inyección es para los casos muy urgentes para atacar a los virus que no se pueden destruir.

- Será por la preocupación de mis amigos por mi salud, sino me siento muy bien.

- Tal vez, pero no lo creo, ésta inyección no se vende salvo bajo prescripción médica, y para casos urgentes.

- Tal vez, no lo sé, pero estoy muy bien.

- La buena salud es una corona sobre la cabeza de los sanos que no la ven sino los enfermos, perdona por molestarle.

- Para nada, gracias.

George se metió otra vez en sus recuerdos… todavía su corazón sufría por separarse de Lyvi, y se sintió agradecido a Habib y se sentía muy a gusto en su compañía a pesar de ser árabe, recordó sus debates sobre los musulmanes, y cuando le dijo: eres un musulmán disfrazado de católico…. éste viaje le fue lleno y muy divertido… la azafata le interrumpió:

- Perdona, ¿qué prefiere pollo o carne?

- Carne.

Su campañero de viaje se dirigió a él:

- ¡Parece que está usted totalmente absorto en sus pensamientos!

- Oh…sí, pues fue un viaje estupendo rico en conocimientos.

- ¿Cuánto tiempo se quedó en Jerusalén?

- Cuatro días.

- ¡Solo!

- Sí, pero son como meses, y jamás olvidaré a la gente estupenda con quién me he encontrado, y aprendido mucho en esta tierra santa.

- ¿Es usted judío?

- No… ¿por qué?

- Soy judío… perdona pero normalmente nadie se siente a gusto en Jerusalén salvo los judíos, porque el país está preparado para ellos, pero los cristianos y los musulmanes no encuentran las mismas comodidades, y cuando me habló de su felicidad y de la gente estupenda allí creí que era judío.

- Me he encontrado con judíos y cristianos en Jerusalén, todos fueron estupendos

- Tal vez lo que dice sirva en Inglaterra, pero en Tel Aviv es la religión la que mueve a la gente y a los pueblos.

- Es usted judío, ¿podría hacerle una pregunta?

- Sí.

- ¿Está usted convencido de las enseñanzas de la Torá?

- No, pues no se entiende salvo a través de las enseñanzas del Talmud.

- Bien, ¿y está usted convencido de las enseñanzas del Talmud?

- Jaja tampoco, pero es así nuestro canto.

- Perdona, pero ¿no le molestan estas conflictos internos?

- No hay quien no le moleste esto, pero la gente difiere en tratar con lo que les molesta.

- ¿Cómo?

- Yo huyo de éstos conflictos en concentrarme en mi trabajo, y hay quien huye a la bebida y a las mujeres, y quien huye a las investigaciones científicas de estos asuntos, y hay quien huye en hacerse más religioso.

- Bueno, parece que usted es muy sincero consigo mismo

- Gracias

- Pero falta la pregunta: ¿la huida lleva al bienestar o no?

- Creo que los juiciosos están de acuerdo en que quien vive sin religión estará enfermo, y de ahí la huida en intentar alejarse de las contradicciones de la religión y también es un intento de huir de la enfermedad del ateísmo y su oscuridad.

- Salvo quien huye a la investigación científica, ¿no lo cree?

- Sí, pero no me gusta eso, porque te causa preocupación y estrés y confusión en el pensamiento

- Creo que está diciendo que no hay solución salvo la huida.

- Sí y no

- Jaja, ¿cómo?

- Sí, porque yo solo veo solución en la huida, y porque sé que es imposible que el Señor nos abandonase a la pérdida, a los conflictos y a la huida.

- ¡Parece filósofo y no farmacéutico!

- Nada me ha hecho sufrir más que mi búsqueda de la verdad, pues la metodología científica se contradice con lo que digo y yo he aprendido hablar de una manera científica.

- La búsqueda de la verdad o el camino de la felicidad como me gusta llamarlo hace feliz a la gente y no les hace sufrir.

- ¡Camino de la felicidad! una expresión muy bonita.

- Perdona por interrumpirle, no hace frío en el avión, pues siento mucho frío.

El farmacéutico tocó la frente de George, y notó que su fiebre estaba alta.

- Quizá por eso le dieron esta inyección, ¿cómo se siente ahora?

- Mucho frío, y me siento muy cansado, pero no se preocupe, estaré mejor dentro de un rato, le gusta ‘’el camino de la felicidad’’

- Olvide el camino de la felicidad y dígame, ¿podría darme la inyección y el informe médico?

- Aquí tiene.

El farmacéutico preguntó a la azafata si se encontraba un médico en el avión, y dijo que no, pues estaba previsto que estuviera pero se retrasó…

- No pasa nada, le pondré yo la inyección, pues he asistido a un curso intensivo de auxilios, además soy farmacéutico, va entrar en coma y creo que no se despertará sino después de llegar, ¿podrían pedir una ambulancia que nos espere en el aeropuerto de Londres?

- Parece que el caso es muy grave, pero no necesitamos hacerlo, mi esposa me está esperando con una ambulancia, y creo que usted exagera un poco.

- No exagero, pero no me gusta pasarme de la metodología científica en tratar los asuntos.

(2)

George se despertó de su coma y se encontró en el hospital de Londres, y encontró a Catherina a su lado sonriéndole

- Gracias a Dios por salvarte cariño.

- ¿Dónde estoy? ¿Dónde está el farmacéutico?

- Estas en el hospital en Londres, pero ¿quién es éste farmacéutico?!

- ¿En el hospital? ¿Dónde está el viajero que estaba a mi lado en el avión?

- Ah entiendo, se quedó contigo hasta que te recogí en la ambulancia y se aseguró de que todo estaba bien, y pidió tu dirección y se fue, gracias a Dios por tu salvación.

- Oh mi amor cuanto te echo de menos, y te pido perdón por causarte estas molestias, no creía que el asunto iba llegar a éste punto.

- El medico vio los informes que tenías, y tomó muestras de tu sangre y te hicieron unas radiografías, y dijeron que mañana confirmarán tu caso después de ver los resultados de la analítica.

- ¿Y cuándo nos vamos a casa?

- No lo sé, después de ver la analítica supongo, han dicho que nos confirmaran la situación, y de todos modos debes quedarte aquí como mínimo una semana como dicen

- ¡¿Una semana?!

- No importa la semana, lo importante es que me han asegurado que estarás bien, y les extrañó como te permitieron salir del hospital

- Me pidieron que me quedara y lo intentaron pero rehusé… ¿Qué hay?

- Pediré unas vacaciones y me quedaré contigo, tal vez sea una ocasión para estar juntos pues echo mucho de menos estar contigo.

- Yo también te echo mucho de menos, pero me gustaría ir contigo a casa

- Saldremos pronto no te preocupes, cariño... ¿has visitado la iglesia del Santo Sepulcro?

- Sí…te había prometido visitarla, y visité la iglesia de María, la paz sea con ella

- Qué felicidad para quien rece en esa iglesia bendita, cuanto me gustaría visitar la iglesia del Santo Sepulcro.

- He rezado allí por ti como te había prometido, pero, ¿de qué felicidad hablas?

- No conozco felicidad más grande que la de comprometerte con la adoración a Dios.

- ¡Lo mismo dicen los judíos religiosos, a pesar de que sus fiestas y sus adoraciones son llantos y tristezas!

- Cierto, pero adoran a Dios según una religión abrogada y terminada con la aparición de Jesús, la paz sea con él, pero lo atacaron, lo mataron y torturaron a sus seguidores.

- Pero, ¿los cristianos no creen en la Torá como el Antiguo Testamento?

- Sí.

- Y ¿cómo dices que era una religión terminada con la aparición de Jesús?

- Te veo entusiasmado con el judaísmo, pues terminó cómo religión, y se quedaron las enseñanzas de la Torá para encaminarnos.

- Pero, ¿cómo crees y te encaminas con enseñanzas manipuladas?

- ¡Manipuladas! ¿Quién te dijo eso?

- En la Torá se habla de las hijas de Shiloh: “y dijeron a los hijos de Benjamín: id a las viñas y escondeos allí y esperad hasta que salgan las hijas de Shaloh a bailar y lanzaros sobre ellas y secuestradlas, una para cada uno y llevadlas a la tierra de Benjamín”, ¿sabes quiénes son las hijas de Shiloh? ¿Crees que este tipo de textos vienen de Dios?

- Conozco muy bien quiénes son las hijas de Shiloh, y no me gusta hablar de eso, los sacerdotes y los papas deberían de explicárnoslo.

- Y en la Torá también está escrito: “dijo el Señor Dios de Israel: cada uno de vosotros debe llevar su espada y pasar por la aldea de puerta en puerta y matar a su hermano y a su amigo y a su vecino’’, ¿podría ser Dios tan cruel?

- Me gustaría cambiar de tema por favor, conozco estos textos y muchos más, y no me gusta discutirlos, también me gustaría descansar ahora

- ¿Por qué?

- Te dije que no me gustaba discutir éste tema… creo que tienes tiempo de sobra en el hospital para investigar y leer

- Cierto, debo tener mi ordenador portátil aquí, también me gustaría comprar unos libros, pues me gustaría leer sobre las sectas cristianas.

- Estupendo, tal vez te conviertas al catolicismo.

- ¡Tal vez!

- Y tus lecturas serán buenos preparativos para nuestro próximo viaje, ¿no lo habrás olvidado mi amor?

- No lo olvidé, intentaré con el médico para que sea lo antes posible, pero voy a aprovechar ahora mi estancia aquí para leer.

- No te preocupes por tu estancia, estaré contigo y lo pasaremos muy bien hablando juntos.

- ¡Cuanto te quiero Catherina!

- Yo también, permíteme ir ahora y volveré mañana, ya se acerca la noche y estoy aquí desde ayer.

- Lo siento, he hecho que te canses, te espero mañana mi amor, lo importante que estén mi ordenador y mi teléfono a mi lado, para concluir algunas tareas

- Te dejaré el ordenador y el teléfono en la mesa que está a tu lado, pero con la condición de que no te esfuerces mucho, quiero que descanses cariño, te veo mañana.

George no quería dormir, y todavía era pronto para ello, decidió leer un poco, y consultar su ordenador, abrió su correo y se sorprendió con un mensaje de Lyvi rogándolo decirle cómo iba de salud, le contestó y le contó lo que le había ocurrido, y le agradeció por la inyección y por su buen recibimiento y por todo lo que le había ofrecido. Le contó que no había olvidado su promesa y que no pudo usar su ordenador y su teléfono antes, y que estaba en su promesa de informarla sobre el camino de la felicidad, y le pidió que agradeciera a Habib también.
Y encontró otro mensaje de Adam, contestándolo sobre los placeres del cuerpo y la desgracia del alma diciendo:

“Si el alma no se hace feliz junto al cuerpo, lo que llamas felicidad del cuerpo sería la desgracia para el alma y el cuerpo, y esa filosofía quedaría en una filosofía negra, que considera que la vida es desgracia sin felicidad alguna, acaso hemos sido creados para sufrir o para vivir felices. El pensamiento que dice que hemos sido creados para el sufrimiento es pensamiento más bien ateo que acusa al Señor de todos los defectos, o es un pensamiento más bien cercano a las creencias terrenales idólatras lejos de entender la naturaleza del Dios y de los humanos y de la religión o más bien un pensamiento de las religiones afectadas por la idolatría a causa de su falsificación y su manipulación. De todos modos éste pensamiento indica la desgracia de sus seguidores y sus conflictos internos más que un pensamiento científico, filosófico o religioso… Debes haber llegado de tu viaje podríamos encontrarnos y discutirlo”.

George terminó de leer el mensaje y lo releyó otra vez, luego se dijo: Adam está como siempre, no sé si es un filósofo, protestante o judío. Y no sé por qué encuentro en sus palabras -a pesar de su edad joven y su simple empleopalabras sencillas y profundas al mismo tiempo. Es cierto como dice Adam: el alma no será feliz sola y tampoco el cuerpo, el ser humano es una unidad entera y desmontarlo sería hacer superficiales los temas profundos. Cualquier placer corporal es un simple capricho seguido de una enfermedad del alma y el cuerpo, y cualquier placer del alma es retraso aunque lo llamen moral o espiritual como en el budismo, en el camino de la felicidad el alma debe juntarse con la mente y el cuerpo, de una manera que le haga feliz y no sufrir, para que el cuerpo disfrute de una mente sabia, rodeado de alegrías espirituales que le educan y le eleven. ¡Cuántas religiones huyen de los placeres corporales para hacer disfrutar al alma, y cuantas otros huyen de los placers espirituales para permitir al cuerpo disfrutar y al final no pudieron hacerlos felices ni a uno ni al otro.
George miró en la hora, eran las ocho de la tarde, entonces llamó a Adam.

- Hola Adam, estoy en Londres pero estoy en el hospital, ¿puedes venir a visitarme y así continuamos tu filosofía y nuestros debates?

- Que te mejores… iré a visitarte, y no te molestaré con mis debates ni con mi filosofía como te gusta llamarla, y espero que no sea pesado para ti.

- No quise decir eso, verdaderamente disfruto con tus debates y tu filosofía, espero que no me entiendas mal.

- No quise decir que esté molesto con tus palabras, el asunto es sencillo y a mí me gusta la sencillez e intentaré visitarte mañana por la tarde .

- Te espero Adam, echo de menos a tus debates.

- Jajaja, te veo mañana, parece que confundes entre el anhelo a debatir y el anhelo al café que te sirvo, adiós.

George colgó el teléfono y se quedó pensando… ¿cuál es el secreto que le atrae a Adam? Se nota de su aspecto que no es inglés, podría ser griego o italiano o de latino, pero encuentra con él una paz y un consuelo muy grande, ¿cómo lo vería Lyvi si se encontrara con él, jaja, resistiría Adam delante de sus ojos azules, y su pelo rubio? ¿O sería como un segundo Cakh, y que sus consejos serían puras palabras como la mayoría de la gente? jaja ¿o sería como yo? de todos modos vendrá mañana y le contaré todo lo que me pasó…

(3)

La enfermera despertó a George por la mañana temprano, y le dijo mientras le ponía el desayuno en su mesa…

- ¿A qué hora llega el médico?

- A las nueve pasará por todos los pacientes del servicio. Lo importante es que si se siente con fiebre debe avisarnos rápidamente, le tomaremos la fiebre todas las horas a partir de las ocho que es cuando termina el efecto de la inyección que se hizo.

- Gracias, parece que el tema de la fiebre es peligroso y es muy probable que venga periódicamente.

- Lo importante es que si siente fiebre o mucho frío debe avisarnos

- Vale, vale.

George terminó su desayuno y se sentó reflexionando sobre lo que dijo la enfermera, y se acordó de la insistencia de Lyvi sobre la inyección… se sintió algo preocupado y confuso mientras estaba esperando al médico que llego a su habitación sobre las nueve y media…

- ¿Podría informarme de mi situación por favor?

- Las analíticas hasta ahora dicen lo mismo que las que se hicieron en Jerusalén.

- Perdona desconozco los resultados de la analítica de Jerusalén, ¿qué era?

- Hay un virus raro que atacó a las neuronas, provoca un aumento brusco de la fiebre sin ningún síntoma previo, así que debe permanecer en el hospital a pesar de que normalmente no sufre de nada, pero si sube la fiebre debemos inyectarle un sedante cuyo efecto durará un día o dos.

- Y ¿hasta cuándo debo estar en el hospital?

- Por ahora no lo sé, hay otras analíticas que estamos esperando, y saldrán dentro de los dos próximos días, y en el peor de los casos no superará eso dos semanas, si no nos sorprende algún imprevisto.

- ¿Y cuál es la causa de éste virus?

- No se sabe hasta ahora, pero tranquilo, intentaremos ofrecerle todos los medios de bienestar, y le informaremos de las novedades en su momento, le pido disculpas, es todo lo que sabemos sobre su caso hasta ahora.

- Muy amable, muchas gracias.

El médico se disculpó y se fue….George sacó su ordenador para planear y organizar su larga estancia en el hospital, decidió dedicar la mayor parte de ese tiempo a la lectura, ya que está buscando el camino de la felicidad necesitaba conocer más a la religión más importante para él, su misma religión , se burló de sí mismo mientras murmuraba: “conocer a mi religión ! conocer al cristianismo y sus sectas”, también decidió dedicar un tiempo para debatir con Catherina, pues es teóloga cristiana, también con Adam y Tom, además de los debates electrónicos con Lyvi y Habib si pudiera, luego se metió a leer sobre la comparación entre la religión ortodoxa y la católica y la protestante, como son las tres más importantes y más conocidas, y si se metiera a estudiar a todas las sectas no terminaría nunca
Caterina llegó después del mediodía acompañada de Michael y Saly, cuando los vio George se puso muy contento… les echaba mucho de menos, les sentó a su lado y empezó a jugar y bromear con ellos, se sentía feliz riendo con ellos y se acordó de los placeres que hacen felices al cuerpo y al alma… y sintió que los estaba viviendo con sus hijos, y se dijo si pudiera conocer a todo lo que hace feliz al cuerpo y el alma juntos, entonces habría llegado seguramente a la felicidad.
Se dirigió hacia sus hijos con una pregunta… que le vino a la mente…

- ¿Cuál es lo que más te hace feliz en la vida Michael?

- Jugar contigo, y también jugar al fútbol.

- ¿Y tú Saly?

- Yo también jugar contigo y jugar con las muñecas.

- Y a mí me gusta jugar con vosotros, pero ¿hay algo más que os haga felices fuera de jugar?

Dijo Michael extrañado :

- A veces siento felicidad y no sé ¿por qué? ¿Y a veces me siente triste y no sé por qué? ¿Por qué será papá?

- ¿Por qué será, en tu opinión Michael?

- Tal vez la felicidad sea por haber ayudado a algún amigo o compañero, y la desgracia sea por alguna cosa mala que haya hecho.

Se dibujó una sonrisa muy grande sobre la cara de Caterina contenta de este estupendo diálogo familiar, y dijo: tal vez cariño la felicidad esté en el corazón cuando amamos a la gente y desearles el bien.

- Te refieres a desear el bien a la gente, aunque no lleguemos a hacerlo mamá

- Sí, y lo mismo odiar a la gente y desearles el mal aunque no lo hagamos.

George quiso enriquecer más el dialogo y dijo: Entonces Michael y Saly, ¿por qué la gente no es feliz por sí misma y, elige la desgracia para ella?

- Michael: porque son ricos.

- Saly: o porque no saben.

- Catherina: o las dos cosas a la vez, cielos míos, además la guía y el éxito y la felicidad son gracia del Señor.

- George: y por eso es muy importante esforzarse en el camino de la felicidad.

- Michael: te he escuchado decir a mamá que ibas a viajar a Jerusalén para buscar y conocer el camino de la felicidad, ¿acaso el camino de la felicidad está solamente en Jerusalén?

- Jaja, no hijo, lo que pasa es que estoy buscando la verdad y coincidió con mi viaje a Jerusalén para firmar contratos de trabajo, y así aproveché para aprender y conocer y aprender de la gente.

Dijo Saly con inocencia :

- No me gusta la gente de Jerusalén.

Dijo George extrañado:

- ¿Y por qué?

- Una compañera mía dice que su familia va a Israel en Jerusalén, y dice que en Israel hay asesinatos y encarcelamientos y torturas y explosiones, así que no me gusta y no me gusta la gente de Jerusalén.

A Catherina le extrañó lo que dijo su hija y dijo: no hay una persona normal que le guste el terrorismo y el homicidio, todas las leyes terrenales y celestiales ordenan la justicia y el buen trato.
Lo que dijo Catherina hizo recordar a George las clases budistas y las leyes del Antiguo Testamento sobre el homicidio y las mujeres y las hijas de Shiloh, pero sonrió y dijo:

- En Jerusalén hay gente muy buena de todas las religiones, musulmanes, cristianos y judíos.

- Saly: pues yo no amo a la judía Lyvi, pues ella ama el homicidio y el encarcelamiento.

- George: ¿y quién es Lyvi?

- Saly: Mi compañera de clase y es judía.

- George: muy bien, es bueno amar y odiar a la gente según sus ideas y sus morales, no según su aspecto o sus raíces.

- Michael: y yo no amo a mi compañero David, pues habla siempre sobre el vino.

George miró a Catherina brevemente... y sonrió.

- ¿Y qué pasa con el vino Michael?

- No lo sé, todo lo que sé es que hace perder la cabeza.

Se notó la vergüenza en la cara de Catherina quien respondió a su hijo:

- Muy bien Michael, también está prohibida en nuestra religión como dice en el Nuevo Testamento (vino y embriagante no bebas)…

Catherina observó una mirada extraña en la cara de George entonces cambió de tema:

- ¿Has visto al médico George?

- Sí

- ¿Hay algo nuevo?

- No, parece que es la misma analítica del hospital de Tel Aviv, pero no sabía lo que contenía.

- Qué raro, no te informó el médico allí del resultado

- De los servicios que me ofreció la empresa allí fue que una funcionaria suya se encargó de contactar con el hospital para recoger los resultados, se llama Lyvi , y no quiso informarme de lo que tengo para no preocuparme.

- Se le notaron los celos a Catherina y dijo: ¡se ve que Lyvi es guapa y se preocupa por no dañar tus sentimientos!

- Saly: si es como mi compañera Lyvi pues no es ni guapa ni buena.

- George: Lyvi era muy buena y guapa.

- Catherina: para las judías tienen el sexo es fácil como está en el Antiguo Testamento.

- Michael: ¿el Antiguo Testamento incita al sexo, mamá?

- Catherina: estaba bromeando Michael, luego se dirigió a George y dijo; ¿no es así George?

- Sí… sí, a tu madre le gusta bromear mucho… no hay una religión justa que incite a matar y a consumir alcohol o a practicar el sexo sin normas, no hay nadie que siga una religión justa que cree en eso.

Catherina entendió el mensaje de George mientras hablaba con Michael, intentó otra vez cambiar de tema, y dijo:

- Me voy ahora cariño, llevaré a los niños a casa que ya es tarde, vuelvo enseguida.

- Te esperaré cariño… Luego se dirigió a sus hijos y dijo: me gustaría que me visitéis por lo menos cada dos días héroes, os quiero.

(4)

George se entregó a sus pensamientos después de que Catherina se fuera con los niños, y se preguntó: ¿voy a quedarme toda la vida en la lucha de pensamientos e ideologías y religiones? ¿Por qué no armonizan éstas religiones con la felicidad de toda la humanidad? ¿Por qué la gente no sigue la religión verdadera que hace feliz a todos? ¿Por qué no vive la humanidad entera en paz consigo misma? ¿Y en paz con los demás? Luego sonrió y se dijo a sí mismo: ¡Tal vez me haya convertido de repente en Platón, que extraña es ésta vida, nos convierte a veces en grandes idealistas! Imagino si el Señor hubiera hecho llegar a la personas hacia él sin dificultad… ¡A lo mejor vivir se hubiera hecho aburrido, o a lo mejor nos habríamos convertido en otras criaturas diferentes a los humanos débiles y entonces no habría maldad, ni tampoco bondad, porque no se conoce la bondad sin conocer la maldad, la existencia de ambos significa que estamos vivos, ay! Cuanto tiempo pierde el ser humano en su filosofía y sus pensamientos mientras no sepa el significado de la vida, de la muerte y a donde irá…
Estaba esperando la llegada de Catherina a pesar de que acababa de irse, y esperaba la visita de Adam... encendió el ordenador, y miró en el correo electrónico, encontró un mensaje de Cakh agradeciéndolo el esfuerzo y el cumplimiento de su tarea, e informándolo que supo de su enfermedad a través de su esposa, y que vendría a visitarle hoy o mañana, luego entró en la cuenta de Adam en Facebook, y no le envió un mensaje de amistad para que Adam no se diera cuenta de que George leía lo que escribía sobre él… encontró un segundo artículo sobre él titulado: (Lecciones de mi amigo buscador de la felicidad 2) donde escribió:

Mi amigo el buscador todavía sigue insistiendo en conocer el camino de la felicidad, y he aprendido de él estas lecciones

1Las cosas grandes, como la búsqueda de la felicidad necesita un esfuerzo enorme y una prueba grande,

2La insistencia crea las oportunidades, cada vez que mi amigo insistía se le salía oportunidades para aprender y conocer.

3La gran victoria que puede lograr el buscador de la felicidad es la victoria sobre sí mismo, y no su victoria sobre los acontecimientos de la vida

4A pesar de la fuerza de la insistencia de mi amigo y de su buena voluntad, lo que temo por él es que conozca todo lo que no quiera pero no se concentre en lo que quiera de una manera suficiente.

Y a esperar más lecciones pronto… saludos a todos, Adam

George volvió a leer lo escrito otra vez de una manera más concentrada, sentía como si Adam supiera lo que le pasaba por la mente, se dijo a sí mismo: ¿a qué se refiere con la prueba grande? Y ¿qué quiere decir la victoria sobre uno mismo? ¿Acaso sabe Adam que su amigo ha fallado en el examen y vendió sus principios y ofreció soborno? ¿Sabe que besó y abrazó a una mujer bella? y ¿que deseó traicionar a su esposa con ella? ¿Sabe que no decidió dejar ésta empresa cuyo director es inmoral sino que le ayudó a ofrecer soborno a veces? Luego ¿qué quiere decir con el último punto? Y ¿por qué teme que conozca todo lo que no quiero y no conocer lo que quiero? ¿Acaso conocer lo que no quiero implica obligatoriamente conocer lo que quiero? es cierto que no quiero ser un ateo perdido, ni budista ni hinduista adorando a las vacas o a miles de otros dioses, y no quiero ser judío complicado... ¿Pero qué quiero? parece que el temor de Adam es razonable, intentaré discutir con él sobre ello sin decir que había leído nada de su cuenta, así continuará escribiendo con libertad.
George sintió que la habitación empezaba a estar fría, y se levantó para subir la calefacción y se sintió débil, le vio la enfermera y le vino rápidamente…

- ¿Siente frío?

- Un poco, tal vez se bajó la calefacción.

- -La calefacción está igual, descanse en su cama, contactaré con el médico y le traeré la inyección enseguida.

La enfermera salió, y volvió rápidamente para ponerle la inyección a George…

- Es la nueva inyección que le prescribió el médico.

- ¿La nueva?

- Tiene un efecto más largo, pero le hará perder la conciencia completamente, le pido perdón, debería ponérsela rápidamente, ¿podría tender su mano?

La enfermera pinchó a George y enseguida entró en coma y no se dio cuenta de nada.
Catherina regresó y encontró a George en ese estado, se sentó a su lado esperando a que se despertara, se puso a mirarle mientras estaba tendido en la cama, sentía amor por él, conocía su bondad y su amor por ella. Sin embargo no paraba de debatir con ella, y tampoco le gustaba rendirse al Señor como decía el catolicismo… se quedó pensando que a ella le gustaban sus debates, a pesar que se quedaba perpleja a veces, pues a muchas de sus preguntas no les encontraba respuestas claras, ella cree que es suficiente con entregarse al Señor para aliviarse de la carga de esas preguntas y debates, o ¿es que la entrega al Señor era algún tipo de huida de contestar aunque sea de una manera ilógica? Es cierto que las contradicciones del catolicismo le cansaban a veces, pero el judaísmo o el protestantismo también contenían las mismas contradicciones, o quizá más… ¿Acaso la entrega absoluta no sería mejor para ellos dos aunque fuera algún tipo de huida? a veces la huida es mejor que una batalla perdida, pero por qué no es una victoriosa... ah, perdón oh Mesías no quise decir no nos habías salvado pero….
Se acordó de Lyvi la bella judía que él había mencionado… ella confiaba mucho en George y conocía sus valores y su fidelidad, pero ¿por qué volvió de Jerusalén sólo con los textos de índole sexual? Luego sonrió mientras reflexionaba en sus celos… ¿dónde estaban estos celos cuando Tom la besó, acaso George no tenía mucha razón en eso? ¿Cómo es que consuma alcohol sabiendo que está prohibido en el Nuevo Testamento, y así se lo enseñaba a mis hijos? Señor, ¿qué le diría si discutiera esto conmigo?...
Mientras Catherina seguía con sus pensamientos, oyó la voz de un hombre preguntando a la enfermera: ¿cuál es la habitación George guapa? sus miradas eran más insolentes que sus palabras…. La enfermera señaló la habitación, y él entró y estrechó la mano a Catherina.

- Hola, ¿eres la esposa de George?

- Sí, soy Catherina, adelante, ¿quién eres?

- Soy Cakh compañero de George en el trabajo, me contestaste ayer y me informaste de que estaba en el hospital, ¿cómo está?

- Bien, tiene fiebre, y le inyectaron la medicación para tranquilizarle y bajar le la fiebre, está dormido y no tiene conciencia de lo que pasa a su al rededor.

- ¡No pareces británica!

- Soy británica de raíces indias.

- Jajaja la belleza oriental está muy clara, por eso George pasaba de ella cuando se fue a la India.

- ¿Pasaba de qué?

- Pasaba de las muchachas indias, jaja de todos modos te felicito, parece que has encantado a George con tu amor.

Catherina se sintió muy molesta y se le notó en la cara….

- Te veo por primera vez, tal vez George escondiese tu belleza de mí, pues estoy honrado de conocerte, y estoy dispuesto a servirte en lo que quieres, y si deseas trabajar con nosotros en la empresa, estamos dispuestos.

- Gracias, soy teóloga, y me dedico a servir a la iglesia.

- Con nosotros ganarías más y creo que es más cómodo.

- Me dedico a la iglesia, y no me pienso cambiar de trabajo.

- El asunto está en tus manos, piénsalo, George ha trabajado mucho por la empresa y el consejo de dirección está muy impresionado por sus logros, sobre todo después de su último viaje a Tel Aviv, imagínate, en dos viajes consecutivos pudo firmar los contratos deseados y con total perfección, y con el consentimiento de todos los clientes.

- Tal vez sea por tus consejos, pues eres su director.

- Tal vez, y no lo creo, sobretodo en tema de mujeres

En ese momento... llamó a la puerta un hombre preguntando:

- Disculpen... ¿es esta la habitación de George?

- Sí, está en coma, y soy su esposa, ¿quién eres?

- Soy su amigo Adam, me llamó hoy y estaba bien, ¿qué le pasó?

- Su enfermedad se manifiesta repentinamente y su temperatura sube lo que requiere ponerle una inyección analgésica que le provoca este coma profundo.

- Cuanto lo siento por él, ¿hay algo que pueda hacer para ayudar a mi amigo?

- Gracias por estos nobles sentimientos, siéntate.

- Gracias.

Adam se dirigió a Cakh para saludarle, pero éste le respondió con superioridad, y Adam le dijo con educación…

- Perdona... no nos hemos presentado

- Soy Cakh el director de George en el trabajo y tú, ¿a qué te dedicas?

- Soy camarero en una cafetería y amigo de George.

- ¿Camarero?

Adam se puso rojo pero ocultó su enfado y dijo con la tranquilidad y aborrecimiento:

- Puedes preguntarle cuando se despierte! y pienso que la amistad se forja sobre el acercamiento espiritual e intelectual y no la material !

Catherina replicó rápido y se le notaba el disgusto por las palabras de Cakh:

- No te preocupes Adam, George me habló mucho de ti… y está muy contento con tu amistad, tus opiniones y tu sabiduría.

- Es por su amabilidad y sus buenos modales… luego miró a Cakh y prosiguió: ¡él es ingeniero y un gran técnico y yo un simple camarero!

Cakh dijo con superioridad:

- ¡Efectivamente!

- Cakh deseo que respetes al amigo de George por favor.

- Jaja me dices eso por un hombre que su sueldo no sobrepasa el sueldo del personal de limpieza en mi empresa.

- Él es el amigo de George, además el dinero no lo es todo, y ¿crees que la gente se valora con el dinero?

- Parece que eres como George… y no me agrada estar con un camarero, lo que importa Catherina es que mi oferta sigue en pie… ésta es mi tarjeta y mi número, si necesitaras cualquier cosa llámame, adiós… y mis deseos a George de curarse.

- Te pido disculpas Adam por lo que dijo.

- No tienes por qué, yo valgo por lo que soy como persona y no es por lo que dice la gente de mí, luego tú no has dicho nada malo para disculparte.

- Veo que George tenía razón sobre lo que dijo de ti.

- Gracias, muy amable…

- Me habló mucho de tu religiosidad y de tu sabiduría de tus consejos.

- George es un honesto buscador de la verdad y llegará, Dios no abandona a quien busca llegar a él.

- Palabras profundas sobre la confianza en Dios, pero temo que odie a todas las religiones por las contradicciones que encontrará en ellas.

- No lo creo.

- ¿Por qué esta confianza?

- No hay contradicciones en la religión verdadera, y llegará a ella.

- ¿Eres católico o protestante?

- Si me permites no contestar…

- Como quieras, es una simple pregunta.

- Visitaré a George próximamente, te pido permiso ahora.

- George estará muy feliz de tu visita mañana, no tardes.

- Lo intentaré mañana o pasado, y le llamaré mañana de todos modos para ver cómo va. Adiós.

El efecto de somnolencia de la inyección empezaba a disminuir, pero George sentía pesadez en su cuerpo, e intentaba abrir los ojos muy difícilmente, y mientras estaba en ese estado escuchó todo lo que pasó entre Catherina, Cakh y Adam, y pudo distinguir una parte y se confundió en otra, después de que Adam se marchara intentó abrir los ojos y se sintió mejor pero al escuchar unos pasos de un visitante dirigiéndose a su habitación, prefirió no hacerlo y permaneció en el mismo estado, al escucharle saludar a Catherina lo reconoció, era Tom el médico…

- ¿Cómo va nuestro filósofo?

- Hola Tom por desgracia le subió la fiebre de repente y le dieron una inyección, ahora está inconsciente.

- Que se ponga bien, George es un ejemplo único, a pesar de que siempre discutía con él, pero he aprendido de él más que él de mí.

- Eres su médico, y ha mejorado mucho desde que empezó a verte.

- Fui yo quien ha mejorado mucho, tal vez ni tú ni George sabíais que he sido un médico frívolo, me interesaba únicamente por las mujeres y los placeres, y no sé por qué la filosofía de George y mis lecturas de las religiones últimamente y mis visitas a la iglesia contigo, cambiaron mi vida. Y por cierto te pido disculpas por aquel beso, créeme no lo quería hacer, y no sé por qué lo he hecho.

- El asunto está zanjado, tal vez fuera mi culpa, me he pasado con el maldito vino aquel día.

- Nos gusta filosofar sobre nuestros errores con aquello de que no sabemos por qué hacemos algo o si hemos sido obligados a ello, déjanos de esto ahora y dime, ¿qué dice el médico de George?

- El asunto no está del todo claro, y espero que en los dos próximos días el medico tenga una opinión clara.

- Estará bien y el Señor le protegerá.

George fingió encontrar dificultad en abrir los ojos, e hizo como que acabara de despertarse… preguntando por lo que la pasaba...

- George cariño te has despertado.

- ¿Desde cuándo estoy así?

- Desde hace tres horas, y me informó la enfermera que te había pinchado antes de que llegara, gracias a Dios por tu salvación… luego se dirigió a Tom y dijo: es tu médico vino para visitarte y ver cómo vas.

- ¿Cómo estas George?

- Bien, ¿cómo va mi médico?

- Bien, pregunté a Catherina por ti, y me tranquilizó, no quiero molestarte, vendré a visitarte otro día.

- Estamos en el hospital, ¿cuándo va ser nuestra próxima cita?

- Cuando quieras, y será aquí en tu habitación.

- Bien, entonces será dentro de los próximos días.

- Si tienes tiempo sigue leyendo sobre las religiones celestiales, así nuestra cita sería más provechosa.

- Bien, de acuerdo

Catherina sonrió mientras tomaba uno de los libros de George en la mano, y dijo:

- Ya ha empezado desde ayer.

- Estupendo George.

- Intentaré dedicar el resto de mi larga estancia aqui a los debates…y se dirigió a Catherina y sonrió, y dijo: aunque no le gusta debatir y lo corta rápidamente.

Catherina se puso roja:

- Os prometo que intentaré no cortar los debates.

- Jajaja está bien, y os visitaré otra vez si puedo, para debatir contigo, mis deseos de mejorarte, con permiso, me voy.

Cuando Tom se había marchado, Catherina se dirigió a George sonriendo:

- Te pido perdón mi amor, por cortar las conversaciones, pero ayúdame a no hacerlo.

- Estaba bromeando

- Pero tienes mucha razón... Iba a preguntarte: ¿quién este insolente Cakh que dice que era tu director?

- ¿Y qué pasa con Cakh?

- Se ha presentado hoy, y cuán insolente era en sus modales y en su trato, y si no fuera por respeto a ti, le habría echado.

- ¡¿Por respeto a mí…?! puedes echarle, cuánto le odio, pero qué puedo hacer.

- ¡Sus miradas eran descaradas, y también sus palabras y su espíritu imagínate que ha despreciado a Adam por ser camarero y él director, y hablaba con la enfermera con insolencia!

- ¿Adam ha venido?!

- Sí, y Cakh le ha tratado mal, pero él estaba muy educado.

- Me parece a veces que Adam es la imagen inversa de Cakh.

- A pesar de su edad que se nota que es joven, y a pesar de su empleo, hablaba con la sabiduría de los ancianos y los filósofos.

- ¿Entonces crees ahora lo que te decía antes sobre Adam?

- Si admito todo lo que habías dicho, y no dicho, yo te quiero George, Cakh me dijo que eras lo contrario a él en el tema de las mujeres, y yo conozco muy bien su insolencia y tu buena educación.

- ¿Y la encantadora Ormelia, y la bella Lyvi?

- Confío mucho en ti mi amor, creéme confío en tus buenos modales, y ¿tú, confías en mí?

- Sí.

- ¿Y mis salidas con Tom?

- Me contó Tom lo que pasó entre vosotros en la última velada.

- Creéme no entiendo cómo pudo pasar aquello

- Ah… ocurren muchos errores y no sabemos cómo ocurren, confío en tu religiosidad y tu educación, cariño.

- Te quiero George.

Miró su reloj y dijo:

- Tengo que irme ahora, volveré mañana.

- ¿Te espero mañana? me has prometido un debate sobre lo que dice el evangelio: (vino y embriagante no bebas)

- De acuerdo mi amor, y estaré sincera contigo.

- De acuerdo cariño.

(5)

Catherina se fue… George cerró sus ojos, intentó recordar las voces que escuchó cuando se despertaba, pudo distinguir las palabras de Tom más claras que de otras, y lo que dijo sobre su cambio, esa información le había sorprendido y sintió que decía la verdad.
Recordó también algo de las palabras de Cakh y de su fanfarronería y su desprecio a Adam, y recordó la amabilidad y el buen trasto de Adam, y sonrió de la alabanza de Cakh por concluir los contratos, y la admiración del consejo de dirección por su trabajo, y se preguntó: ¿tendría la valentía suficiente para presentar su dimisión después de salir del hospital para que no sea un instrumento inmoral en manos de Cakh, o el dinero y el puesto vencerían a sus valores?
Y mientras que estaba inmerso es sus pensamientos, escuchó la voz de la enfermera diciéndole:

- Hola, ¿cómo va con la fiebre ahora?

- Ah, estoy ahora mucho mejor.

- Pensábamos que iba a despertarse antes de lo previsto.

- Efectivamente… me he despertado hace un rato, pero estaba cansado, y mantuve los ojos cerrados.

- No se preocupe, su temperatura ahora está bien, con permiso.

- Gracias, y le pido perdón por el mal comportamiento de mi visitante pues me lo contó mi esposa.

- No era yo, era mi compañera, generalmente estamos acostumbradas a este tipo de gente, no se preocupe por eso, y gracias por su amabilidad… me llamo Zinta, llámeme cuando me necesite.

- ¡Zinta un nombre algo raro!

- Nuestras raíces son de Austria, y no de Inglaterra.

- Conozco a una austríaca muy buena como tú.

- Que extraño, son muy pocos los austríacos en Inglaterra.

- Lyvi no es de Inglaterra, la conocí en Tel Aviv.

- ¡Judía! Los judíos destrozaron Europa, entonces los alejamos de nosotros entregándoles a Palestina y Jerusalén.

- ¡Parece que sientes aversión hacia los judíos!

- Tal vez, pero usted no convivió con los judíos mucho… si me necesita llámeme en cualquier momento, le llegará la cena ahora, usted no comió y debe descansar.

- Gracias, muy amable

- Perdón señor.

Al día siguiente George se despertó con vitalidad que no encontraba en estos últimos días, hasta que llegó a desear salir del hospital, pues estaba aburrido de estar allí, el desayuno le llegó temprano, desayunó y luego decidió ponerse a leer hasta la llegada del médico, haría comparaciones entre el judaísmo y el cristianismo, y leería sobre la mujer en el cristianismo y la compararía con su la mujer en el judaísmo, y así podría discutirlo con Catherina, o con Lyvi y Habib cuando contaría con ellos .
El médico entró y George le saludó y le preguntó:

- ¿Alguna novedad sobre la analítica?

- No, hemos recibidos algunos resultados y faltan otros, no se preocupe.

- No estoy nada preocupado, solo era una pregunta, ¿qué hay en los resultados obtenidos?

- Tenemos que esperar al resto para decidir, no quiero preocuparle, pero a lo mejor necesitaría una cirugía.

- ¿Cirugía?!

- Le he dicho que no se preocupe, la cura esta en las manos del Señor, nosotros solo somos los medios.

- ¡Créame no estoy preocupado, pero me sorprende que mi estado llegue a este punto!

- Lo sé, dice la enfermera que estaba siempre ocupado con la lectura y los debates, y esto es estupendo porque la lectura combate la ansiedad… estamos esperando los resultados entre hoy y mañana.

- Espero el resultado y estoy seguro de que será bueno.

- Estupendo, ¿podría justificarme ésta confianza profunda?

- No hay duda de que el Señor es más misericordioso con nosotros que nosotros mismos.

- Entonces es usted religioso, generalmente los religiosos son más capaces de soportar y vivir felices, solo nos cuesta tratar con los ateos, que creen que ésta vida lo es todo para ellos.

- Perdona, no quería decir eso, lo que quise decir es que Dios es misericordioso con nosotros en esta vida , aunque esto tiene un significado más profundo, el creyente aspira a la eternidad de la otra vida, pero esto es específico de los fieles de las religiones celestiales únicamente.

- Parece un filósofo, y yo tengo trabajo… pero diga en breve: ¿por qué esto no lo pueden hacer los budistas y los hinduistas?

- Porque no creen en la otra vida, solo creen en el traspaso de las almas.

- Jaja, una creencia primitiva, aunque me encanta hablar con usted, estoy obligado a irme, saludos

George continuó con su lectura y análisis, hasta que le interrumpió la llamada de Adam…

- Hola Adam, me dijo Catherina que me habías visitado, gracias.

- ¿Hay algo que pueda hacer o ayudar, mi amigo?

- Muy bonita la palabra: mi amigo, te estoy agradecido, créeme si necesito algo te lo diré… sí me he acordado de algo que necesito de ti.

- Dime, pues me haría muy feliz si me consideras tu amigo de verdad

- Mi deseo es que vengas a verme, tengo muchas cosas que me gustaría discutir contigo.

- Vendré mañana, hoy no puedo discúlpame, tenemos el trabajo duplicado hoy en la cafetería, por la ausencia de un empleado.

- Está bien, te espero mañana.

Catherina llegó justo al acabar George su llamada con Adam, entró con una sonrisa grande y alegre:

- ¿Cómo estás mi amor, hoy?

- Muy bien, ¿cómo estás tú?

- Gracias a Dios por su merced.

- ¿Qué merced de Dios crees que tienes?

- La merced de ser religiosa, de mi dedicación a la iglesia… y… la merced de tenerte como esposo.

- ¿Entonces la religiosidad es una merced en tu opinión?

- ¿Hay duda de ello? ¡No hay nada más feo que vivir sin un Dios en quien te encomiendas!

- ¿Entonces qué opinas de los ateos?

- Sinceramente y sin ninguna cortesía… creo que el ateísmo antes que nada es una enfermedad, enfermedad psicológica y espiritual, enfermedad de la mente y de la lógica, enfermedad para el universo y las creaciones.

- Estoy totalmente de acuerdo contigo, pero, ¿qué merced hay en que tu esposo esté enfermo?

- Me refiero a tenerte cómo esposo, no he dicho la merced de la enfermedad.

- ¿Y qué hay de merced en ello?

- Hay hombres que no respetan a la mujer y la desprecian y no son fieles a sus esposas cómo tú mi amor.

- ¿Acaso el desprecio a la mujer no es proporcional a la religiosidad?

- ¿Cómo?

- Cada vez que aumenta la religiosidad aumenta el desprecio a la mujer.

- ¿Otra vez, quién te dijo eso?

- Las enseñanzas del judaísmo describen a la mujer con los peores defectos.

- Tú dices el judaísmo, ¿por qué lo generalizas al cristianismo?

- No dijo Pablo en su carta a Corintios: (que se callen las mujeres en las iglesias, no les está permitido hablar sino deben de ser sumisas)

- ¡Hoy pareces un teólogo!

- ¡Te había dicho que me dedicaría a leer sobre el cristianismo mientras estoy en el hospital, y Tom me lo había recomendado también en tu presencia!

- Bien…esto aumenta tu religiosidad…y tal vez te convierta al catolicismo en lugar del protestantismo.

- Tal vez, pero volvamos a nuestro tema, sinceramente la situación de la mujer en el cristianismo no es tan lamentable como en el judaísmo

- Te prometí ser sincera, y continuar con el debate, así que seguiré debatiendo a pesar de que no me gusta.

- No quiero que hagas lo que odias, confía en que te entiendo.

- No, voy a continuar, veo que como tú necesitas entregarte al Señor yo también necesito usar la mente y el pensamiento.

- Estoy de acuerdo contigo, no hay fe sin entrega al Señor, pero el señor justo no ordena contradicciones o lo que la razón no admite.

- ¿Cómo?

- Podría una religión verdadera traer algo que las mentes rechazan?

- ¿Cómo qué?

- Como un Señor débil, necesitado de sus siervos, o que mata a sus siervos, ¿podría entonces ser un Dios?!

- A pesar de tus graves insinuaciones, admito que es una prueba convincente.

- ¿A qué insinuaciones te refieres?

- No es nuestro tema, nuestro tema es la mujer en el cristianismo, ¿no es así?

- Sí….

- Sinceramente me habría gustado ser hombre, la mujer en el cristianismo viene en un nivel mucho más bajo que el hombre.

- ¡Oh, como en el judaísmo!

- Quizá, o quizá de manera menos fuerte, la Torá y el Talmud manipulados contienen enseñanzas muy brutales, que están llenas de escenas sexuales insoportables…. Mientras que en el evangelio la mujer está por debajo del hombre, contiene más cosas feas respeto a la mujer pero no llega al nivel bajo del judaísmo.

- He conocido textos horribles en el Antiguo Testamento.

- ¿Cómo qué?

- La mujer la heredan como se heredan los bienes: “si unos hermanos viven juntos, y uno de ellos se muere, y no tiene hijos se muere, su esposa no se casa con un hombre extraño sino que el hermano de su esposo se acuesta con ella y la toma por esposa, y asume la responsabilidad como hermano del esposo’’. Y la mujer no hereda: “y hablaron (los hijos de Israel) diciendo: cualquier hombre que muera y no tenga hijo varón trasladará sus bienes a su hija’’, y sobre la mujer menstruante: “y cualquiera que las toque se convierte en impuro, que lave su ropa y se bañe y aun así permanecerá impuro hasta la noche’’… basta con esto ¿o sigo?

- Basta, basta… la verdad que el cristianismo ha liberado a la mujer de muchas cosas del judaísmo, a pesar de la situación deplorable de la mujer aquí, ha mejorado mucho comparándola con cómo estaba en el judaísmo.

- ¿Cómo?

- Dios dio a la mujer sus derechos, por ejemplo los judíos en la época del Mesías se divorciaban de la mujer por la mínima cosa, hasta por estropear una comida, entonces vino el Mesías y prohibió el divorcio salvo que no fuera por causa del adulterio, y así la liberó del dominio del hombre que la divorciaba en cualquier momento y por cualquier razón, y la protegió de su jugueteo.

- Bien…. ¿puedes seguir con otros ejemplos?

- En realidad la Biblia al igual que está llena de textos parecidos a estos, también está llena de otros textos que respetan a la mujer.

- Y ¿cuáles son los textos verdaderos que vinieron de Dios? ¿Pues no es lógico que sean textos contradictorios y verdaderos los dos?

- Has tocado un tema aún más difícil, y estoy cansada de tanto debatir, y no estoy huyendo del debate créeme.

- ¿Cuál es el tema más difícil? dímelo y lo discutimos en otro momento.

- ¿Qué textos son de Dios y cuáles son de la gente?

- Cerramos el debate ahora, y lo retomamos en otro momento.

- ¿Me vas a hablar de la iglesia del Santo Sepulcro?

- A tus órdenes, fui a la iglesia como te prometí, era un viernes y en las calles había mucho tráfico…

Brad les interrumpió que vino a visitar a George…

- Hola George…hola Catherina.

- ¡Hola!

- Me he enterado de tu enfermedad, y vine a visitarte, tal vez me necesitas.

- Gracias.

Brad se dirigió a George y sonrió con maldad y dijo:

- Oh Catherina estás aquí, pensaba que estabas con Tom.

- ¿Qué quieres decir?

- Nada, no te enfades señora.

George se puso recto en su cama y dijo:

- Pienso que no es ni tu responsabilidad ni tu trabajo.

- Tal vez, pero como Tom habla siempre sobre Catherina y su belleza, creí que estaría allí

Dijo George muy enfadado:

- Eres mentiroso y maleducado.

- Y Tom me dijo también que te gustaría ir a Tora Bora, estaría mintiendo también?

Catherina abrió los ojos sorprendida: ¿Tora Bora?!

- No me hagas perder el juicio, gracias por la visita Brad, y por favor sal enseguida, me gustaría descansar.

- Voy a salir, pero cuidado con Tom está jugando con vosotros con sus dulces palabras, él es especialista en jugar con las palabras, podéis informaros sobre las mujeres que había manipulado… y tú George tengo como lo sabías el remedio para todos tus problemas, espero tu contacto, saludos.

En cuanto Brad salió… Catherina se dejó caer sobre la silla suspirando….

- ¡Odio a éste hombre...!

- Y yo le detesto, es una persona sin principios ni humanidad.

- ¿Pero, que quería decir?

- ¿Sobre qué?

- ¿Es cierto que quieres ir a Tora Bora?

- ¿Conoces a Tora Bora?

- Sí,… son las montañas de los terroristas en Pakistán y Afganistán, ¿qué pasa con ellas?

- Hay algo extraño en lo que pasó, Tom estaba hablándome sobre las religiones y sobre el islam, y dijo bromeando: si te conviertes al islam irás a Tora Bora. Y al salir Brad me sorprendió diciéndome si me iría a Tora Bora?

- Él y Tom son mentirosos, no creas lo que dicen sobre mí.

- Conozco las mentiras de Brad, pero Tom me contó lo del beso, y dijo que no era su intención, y no sé por qué le he creído.

- Desgraciadamente lo que dijo Tom era verdad, y tengo más culpa que él en ello, si no hubiera bebido tanto, no me habría atrevido a hacerlo.

- Tal vez entienda lo que hizo Tom como algo involuntario, no sabía porque lo hizo, pero lo extraño es tu insistencia en beber!

- En verdad….

- Y más extraño aún tus palabras a Michael sobre el vino: (vino y embriagante no bebas)

- La persona puede filosofar o justificar algún error que comete, por lo menos a sí mismo, pero voy a ser sincera contigo y conmigo misma.

- Perdón por interrumpirte, ¿a qué te refieres con filosofar y justificar el error?

- Desconocemos muchas de las enseñanzas de la religión, y otras muchas las conocemos pero las desobedecemos, pero el problema está en que no nos gusta reconocer nuestros errores y buscamos justificación lógica o filosófica o incluso religiosa para no parecer equivocados, y el mejor ejemplo de esto es el tema del vino en el cristianismo.

- ¿Podrías explicarlo más?

- Lo normal es que el vino está prohibido en el Nuevo y el Antiguo Testamento, en el Antiguo Testamento: “no es digno de reyes beber vino, ni de príncipes darse a la sidra; pues quizá bebiendo olviden la Ley y perviertan el derecho de todos los afligidos.’’ y en el nuevo: “y no os embriaguéis con el vino que provoca desenfreno, sino que llenaos del espíritu’’

- Bien, entonces lo normal es que esté prohibido, pero ¿esto tendría alguna excepción o alguna ramificación?

- No te burles de mí, voy a ser sincera se dice también que los profetas bebieron vino, en la iglesia también tomamos vino y explicamos eso con que Jesús la paz sea con él dijo sobre sí mismo en el Evangelio de Juan: “yo soy la viña verdadera’’ y sobre sus apóstoles: “sois las ramas’’, y cómo corre el jugo de la viña en las ramas para alimentarlas, Jesús tomó este ejemplo para señalar a su sagrada sangre que bebemos, y corre por nuestras venas para santificar nuestra sangre y nuestra existencia interior completa, pues Cristo no nos dio el jugo de la viña para disfrutar y ni para embriagarnos, sino fue por un objetivo noble y puro que sólo lo alcanzan los creyentes.

- ¡Oh… qué filosofía tan ingeniosa!

- Deja de burlarte de mí, sino no voy a continuar.

- ¡Jaja, está bien, entonces beber vino se convirtió para vosotros en un acto sagrado!

- ¿Has visto como justificamos lo que nos gusta para convertirlo en religioso?

- Esto se admite en una religión terrenal inventada por personas según sus deseos pero no se admite de una religión celestial enviada de Dios.

- Oh, tu nunca te cansas en discutir, y yo estoy obligada a irme a casa para recoger a Saly y Michael, intentaré volver otra vez…y continuaremos nuestro debate, pero se más blando en ello, pues yo me emociono por dentro y por eso me canso, sobre todo con nuestros conflictos internos antes que con nuestra religión.



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